el ritmo

Cosas de novato. Cuando colgué la primera entrega del cómic no pensé mucho en que el formato del blog haría que una vez publicado entero se leería desde el final hasta el principio. Bueno lo cierto es que sí que lo pensé pero creí que no tenía mucha importancia. Hasta que he colgado la segunda entrega, he vuelto a entrar y he comprobado lo incómodo que resulta para el lector: meterse en la primera entrada que es la última página, salir para empezar por la última entrada que es la primera página, salir, ir hacia atrás, etc, etc, etc... no le hace ningún favor al pobre cómic. Asi que prescindiendo de las entregas por fascículos aqui tenéis un montaje más cómodo, rectificar es de sabios.

En realidad este blog tiene vocación de cuaderno y en un cuaderno el error es un elemento más y tiene su valor, en realidad un gran valor. Ya sé que el formato web tiene la ventaja de ser editable y por tanto no tiene por qué haber errores, pero una vez más, éste es mi blog, ja! aqui me tomo una licencia.

Éstas son el tipo de preocupaciones de las que tiene que ocuparse el diseño más allá y por encima de si "esto queda muy bien asi" (aunque no se entienda nada).

El texto del cómic es breve pero me siento particularmente orgulloso de él, dice:

"Se cuenta que una vez en África llegó el fuego. Que sacó de la tierra el corazón del mundo para llevarlo a algún lugar lejano. Se cuenta también que el corazón liberó sus latidos y que lo único que de él quedó en África fue el ritmo".

El arte, la literatura, el cómic, el cine... todas éstas maravillas nacen como un parchecito que quiere tapar el hueco que dejó la tradición oral el día que nuestros abuelos dejaros de contarnos cuentos. Me gusta imaginarme este cómic como la historia que podría haberle contado un abuelo a su familia en torno a una hoguera hace mucho, mucho tiempo... quizás en África.